Una maestra imparte clase en un colegio con niños guardando la distancia de seguridad. / EFE El coronavirus sigue afectando a la normalidad en el funcionamiento de los centros educativos. Desde que volvieron a abrir sus puertas en septiembre, después de seis meses de parón, el número de contagios está siendo un goteo constante. No obstante, hay que matizar que se trata de una minoría del colegios o institutos, dado que más del 95 por ciento no han registrado ninguna incidencia. Además, al tratarse de un escenario totalmente previsible, desde Salud Pública se está actuando con celeridad para controlar las situaciones sin que tenga consecuencias mayores.
El área metropolitana de la ciudad de València, debido al volumen de población que concentra, está siendo una de las zonas más afectadas por la pandemia, tanto en lo que se refiere a número de personas contagiadas como en la repercusión que el virus está teniendo en las aulas. Cuando está a punto de concluir la tercera semana de vuelta a las aulas, al menos nueve centros educativos de la comarca de l’Horta Nord se han visto obligados a activar los protocolos sanitarios por algún caso positivo entre sus alumnos o en el profesorado, aunque de momento no se ha registrado ningún brote.
Por municipiosRafelbunyol ha sido uno de los municipios de la comarca donde la Covid-19 se ha colado en sus aulas. Apenas dos días después del comienzo del curso escolar, una de las aulas del colegio Germanells de la localidad echó el cierre. Una alumna de Primaria dio positivo el martes y su grupo de convivencia estable en el colegio, una veintena de escolares, junto a la profesora, quedaron en aislamiento y se sometieron a las pertinentes pruebas PCR, cuyo resultado negativo se conoció días después. La hermana de la niña de Primaria, también alumna del centro, resultó contagiada y se hizo lo propio con otra aula de Infantil.
También en Rafelbunyol, otro centro educativo se ha visto afectado por la pandemia. Fue esta semana cuando Salud Pública decretó el aislamiento de una de las aulas del centro escolar CEIP Verge del Miracle debido a un caso positivo por Covid-19 entre su alumnado. Los integrantes del grupo burbuja deberán ahora esperar confinados el resultado de las pruebas PCR, tal como establece el protocolo sanitario.
Desde el Ayuntamiento de Rafelbunyol están trabajando en coordinación con Salud Pública, el centro de salud de la población y la dirección de los centros escolares del municipio “para dar rápida respuesta a las consecuencias de la pandemia dentro de los entornos escolares”. Su alcalde, Fran López, han querido lanzar “un mensaje de tranquilidad” a las familias de los niños que acuden a los centros educativos de Rafelbunyol y trasladar “mi solidaridad y aprecio al alumnado afectado”.
Otro municipio donde también se han activado los protocolos sanitarios ha sido Burjassot. Dos casos positivos en dos unidades diferentes detectados en el colegio Miguel Bordonau de Burjassot en las primeras semanas de clase obligó a confinar a los alumnos de los grupos burbuja hasta conocer los resultados de las pruebas que practica Sanidad.
Y esta misma semana, un alumno del colegio La Natividad de Nuestra Señora de Burjassot ha sido diagnosticado como positivo en Covid-19. Según anunció el propio alcalde del municipio, Rafa García, a través de su perfil de Facebook, “ya se han activado los protocolos Covid por parte de Conselleria y las familias afectadas ya están avisadas”. García agradeció a todas las partes el “esfuerzo y trabajo” y recordó que “llevamos dos semanas de clase” en las que “hemos tenido por el momento cuatro incidencias en una población que supera los 4.500 alumnos”, por lo que considera que “la comunidad educativa puede estar muy orgullosa de cómo se está llevando a cabo esta vuelta a las aulas”.
En Paterna, el CEIP Clara Campoamor suspendió, a instancias de Salud Pública, las clases en dos aulas después de que dos padres comunicaron al centro que dos alumnos, de cursos diferentes, se habían realizado las pruebas PCR para determinar si sufren coronavirus al presentar un cuadro febril. Se tomó la medida por precaución y no porque hubieran casos positivos.
También en esta localidad de l’Horta Nord, cuatro casos de personas con fiebre obligaron a aislar una clase de Primaria del CEIP El Parque de Paterna, aunque la situación volvió pronto a la normalidad en este colegio de La Canyada.
En Puçol, el centro educativo American School comunicó la semana pasada a los padres de una de las aulas de bachillerato el positivo por Covid-19 de uno de los alumnos. Fuentes del centro indicaron que, “inmediatamente, pusimos en marcha el protocolo de gestión de casos de la Conselleria de Sanitat y nuestro propio plan de contingencia. El protocolo indica que debemos notificar el caso, determinar los estudiantes bajo la categoría contacto estrecho y pedir a las familias que se pongan en contacto con su centro de salud”.
En Rocafort, el Ayuntamiento comunicó a mediados de septiembre el cierre de una de las aulas de la ‘escoleta’ tras conocerse un caso positivo de Covid-19, que “de inmediato” se comunicó a los padres y madres de los alumnos del centro, según informaron en un comunicado. Se procedió a activar todos los protocolos en materia de limpieza y desinfección de las zonas afectadas.
En Albalat dels Sorells, el colegio El Castell ha aislado esta semana un aula por el positivo de un alumno del centro. Según han indicado fuentes cercanas, los estudiantes del aula afectada estará en confinamiento hasta que se determine por Salud Pública mientras se les va avisando para la realización de las pruebas PCR. El resto del centro, como en otros casos, funciona con normalidad.
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