La portavoz del Grupo Popular, María José Catalá. Archivo/EPDA La portavoz del Grupo
Popular, María José Catalá, ha advertido hoy que Ribó y el PSPV han cobrado ya
a los valencianos más de 163 millones de euros correspondientes a la
contribución urbana del año 2020, “un
recibo al que han aplicado una subida general del 3% y de hasta el 13% para
locales dedicados a la actividad económica”.
La recaudación del IBI de naturaleza urbana, a fecha 19 de mayo, ascendía a 163.426.329,96
€, y el Ayuntamiento prevé recaudar 232,7M€ al final del ejercicio, lo que
supone un incremento de 10,9€ de recaudación más respecto al año 2019.
Las ordenanzas fiscales de 2020 que el Partido Popular ha pedido de
manera constante que se revocarán, aprobadas con los votos a favor de Compromís
y PSPV, ha recordado Catalá, “afectan a prácticamente todos los impuestos”.
Sube el IBI, el impuesto de la circulación, el agua, el recibo de circulación,
la tasa de mesas y sillas, ICIO, IAE, entre otros.
La
política fiscal municipal, ha manifestado Catalá, “es un instrumento fundamental para favorecer el desarrollo social de
nuestra ciudad, impulsar la economía y crear empleo”. Por ello, ha
reiterado, “el Ayuntamiento, una vez que
ya ha consumado la subida para 2020, debería aprobar unas Ordenanzas Fiscales
para el ejercicio 2021 que hicieran de Valencia una ciudad más atractiva para
los emprendedores e inversores”.
Por
otro lado, Catalá ha recordado que los comercios valencianos se enfrentan a un
“triple sablazo fiscal” que perjudica notablemente sus negocios ya que todos
los comercios han visto aumentado sus recibos del IBI un 3%, además aquellos
con un valor catastral superior a 278.512€ se les ha incrementado el recibo un
10%, llegando a pagar de media más de 1.386€ y los comercios con
facturación superior de 1 millón de euros anuales tendrán que pagar el
coeficiente máximo del Impuesto de Actividades Económicas (3,8%).
Por
ello, la portavoz popular ha lamentado que en un situación “tan delicada” como
la actual por la paralización de la economía como consecuencia de la crisis
sanitaria, “Ribó y los socialistas
no estén ayudando en nada a reactivar la actividad de la ciudad con incentivos desde el
Ayuntamiento a través de bonificaciones y exenciones de impuestos a empresas
que contraten de manera indefinida a trabajadores y aquellas que utilicen
energías renovables”.
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