Las enfermedades
bucodentales en general y, en particular, aquellas que afectan
a la estructura del diente, como son las caries; o a las encías, como la
gingivitis o la periodontitis, se encuentran
entre las enfermedades más prevalentes en la población.
Una correcta higiene bucodental de
manera habitual es muy importante a la hora de prevenirlas. Por ello, inmersos
ya en las fiestas navideñas, unas fechas en las que las comidas a deshoras o
fuera de casa se hacen más habituales, es fundamental destacar la importancia
de no descuidar la higiene bucal para evitar, así, problemas a largo plazo.
Como explica el doctor Diego Peydro,
odontólogo y ortodoncista, “si descuidamos el cepillado después de las comidas
solo de manera muy puntual no tiene por qué haber ningún problema; pero, en
cualquier caso, siempre es aconsejable llevar
con nosotros un pequeño kit de higiene con un cepillo de dientes y un
dentífrico y procurar cepillarnos los dientes después de cada comida”.
“Si esto no es posible- continúa el
doctor- siempre debemos dedicar un mayor tiempo al cepillado al levantarnos y
antes de acostarnos para eliminar aquellos restos de comida que se pueden haber
quedado adheridos a los dientes durante el día”.
En cuanto a
los alimentos más perjudiciales para nuestra boca, la doctora Marta Peydro, odontóloga con dedicación exclusiva en
implantología y estratégica dental e investigadora en blanqueamiento dental,
destaca que aquellos de los cuáles conviene no abusar durante estos días, se
encuentran los que
tienen un alto contenido en azúcar y que, además, son pegajosos, como por
ejemplo los turrones blandos, polvorones o mazapanes, entre otros.
“Se trata de alimentos con un alto
contenido en azúcar y que, además, por su textura, pueden quedar adheridos a la
superficie del diente, con lo cual, ese contacto durante más tiempo sobre el
diente puede derivar en que, a largo plazo, afecte a la estructura del diente;
algo que, si se hace de forma muy habitual, podría producir alguna caries o una
inflamación de las encías”, indica la doctora Marta Peydro.
En este sentido, la doctora Peydro desmiente el mito de que existan alimentos que ayuden a mantener
el blanco de nuestros dientes. “El
diente tiene un color estructural, con lo cual no hay ningún alimento que nos
pueda ayudar a blanquear nuestros dientes. Por el contrario, sí que existen
alimentos y bebidas, que por el tipo de colorante que tienen en su composición,
pueden hacer que se adhiera a la superficie del diente y acabe manchándolos.
Estamos hablando por ejemplo del consumo, de manera continuada, de café, vino o
ciertas frutas con un color fuerte como por ejemplo las cerezas, así como otros
alimentos como las espinacas, las alcachofas o la remolacha”.
“Estos alimentos producen una tinción
superficial y también de la estructura del diente, oscureciendo progresivamente
la capa superficial, el esmalte dental, y la profunda, la dentina”, destaca.
Por último, los doctores insisten en que
el mejor
tratamiento para cualquier tipo de problema bucodental es la prevención y, en este sentido, el principal error es pensar que solo se debe acudir
al dentista cuando hay molestias o dolor.
“Otro error es pensar que llega un
momento en que los dientes se caen. Únicamente los dientes que están enfermos se
pierden con el tiempo. Con lo cual no hay que pensar que tus
dientes se van a caer, sino que tienes que pensar que con un cuidado y correcto
mantenimiento puedes conseguir mantener tus dientes durante toda tu vida”,
concluye el doctor Peydro.
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